Hablemos de las comidas fit porque serán las que cumplan un punto muy importante de inflexión en tu éxito, cuando estés comenzando un entrenamiento. Primero, tendrás que saber que podrás realizar 3 comidas principales, siempre en compañía de un snack o dos, uno a media mañana y otro a media tarde.
Lo mejor para los desayunos es tomar una mezcla de avena o porridge con frutos rojos y también algún fruto seco. Para el snack elige frutas que te salvarán de un momento de apuro o hambre repentina y te aportarán mucha fibra.
No dejes de lado las verduras para la comida o la cena en compañía de una proteína magra como el pollo, el pavo o también el pescado. Siempre ten en cuenta que los snacks dulces han de ser para un día en concreto y no como algo habitual. Puedes agregarle a tu tacita de porrigde, por ejemplo, un poco de mantequilla de cacahuete o crema de algarroba.
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